INCIENSO VERDE
Basta de ser la niña buena
monotóna sonriente
la que guarda sus uñas cada día
bebiéndose las sombras
la que va llenando claúsulas sin ruido
con sus malos deseos
En falda de strass verde
lujuriosa
encendida
venderé mis besos verdes
a cualquiera
El perfume barato será de
incienso verde
y en algún rincón oscuro
los labios pintados
el corazón gimiendo
alojaré mis muslos en un cojín de luz
Para sentir al otro
para sentirme humana
como la lluvia verde sobre la tierra
Ingrid Huet
Cuando florece la higuera y las animitas vuelan. Ed. La Trastienda. Poesía. Colección Pez Volante. Santiago de Chile, 1999