EL MISMO
Inevitablemente,
el viento azotará los mismos árboles.
El tiempo no tendrá piedad.
El mar será el mismo mar.
Tu piel y mi piel, un poco más cansadas.
Me verás en vilo
Habré muerto y renacido
Pero seré el mismo.
Desde el poniente,
Un lejano aroma de hojarasca
Trashumará mis sueños.
Tiempo pasado, tiempo presente.
Escudriñando, desconfiada, buscarás vestigios
de aquel que fui.
Yo miraré tu rostro,
mansamente.
No habrá rencores.
Así de simple e inevitable:
Seré el mismo.
Jorge Medina