PERMISO PARA LAVARME
Nunca entendí lo que es un laberinto
hasta que cara a cara con mí mismo
perfil hurgara en el espejo matutino
con que me lavo el polvo y me preciso.
Porque así somos más de lo que fuimos
a la orilla del sol alado y fino:
de sangre reja y muro bien vestidos
de moho y vaho y rata amados hijos.
Roque Dalton
Selección de poemas y versiones proporcionadas por Dina Posada.